Un golpe de calor SÍ es un riesgo laboral
Un golpe de calor sí puede considerarse un riesgo laboral, especialmente en trabajos que implican exposición prolongada a altas temperaturas o actividades físicas intensas bajo el sol. Puesto que, un riesgo laboral se define como cualquier peligro potencial que pueda causar daño, lesión o enfermedad a los trabajadores en el lugar de trabajo, y los golpes de calor entran en esta categoría.
Por todo ello, es esencial y prioritario equipar adecuadamente a los trabajadores durante las épocas de calor, cuidar las medidas preventivas adecuadas en el entorno laboral, y así evitar graves problemas de salud en los entornos de trabajo.