Protegerse adecuadamente de los rayos UV es fundamental para preservar la salud de nuestra piel. Una medida efectiva es utilizar ropa con factor de protección ultravioleta (UPF). La radiación ultravioleta (UV) es una forma de radiación electromagnética que proviene del sol. Se divide en tres tipos: UV-A, UV-B y UV-C. La radiación UV-A tiene longitudes de onda más largas y es menos dañina para la piel, mientras que la radiación UV-B tiene longitudes de onda más cortas y puede causar quemaduras solares y dañar el ADN de las células de la piel. La radiación UV-C tiene longitudes de onda aún más cortas y es filtrada por la atmósfera de la Tierra, por lo que no alcanza la superficie terrestre.
UPF son las siglas en inglés de "Ultraviolet Protection Factor", que significa Factor de Protección Ultravioleta en español. Se trata de un estándar utilizado para medir la protección que ofrece una prenda de ropa contra la radiación UV. Es similar al FPS (Factor de Protección Solar) utilizado para medir la protección de los protectores solares en la piel.
El factor de protección ultravioleta indica cuánta radiación UV puede filtrar una prenda y cuánta puede pasar a través de ella. Por ejemplo, una prenda con un UPF 50 permite pasar solo 1/50 de la radiación UV, lo que significa que proporciona una alta protección contra la radiación UV. Cuanto más alto sea el número de factor, mayor será la protección ofrecida por la prenda.
El factor de protección ultravioleta de una prenda se determina mediante pruebas realizadas en laboratorios especializados. Durante estas pruebas, se expone la prenda a una fuente de radiación UV controlada y se mide la cantidad de radiación que pasa a través del tejido. El resultado se expresa como un número.
Existen diferentes estándares para clasificar los niveles de protección UPF. En general, se considera que una prenda con UPF 15-24 proporciona una protección buena, UPF 25-39 una protección muy buena y UPF 40+ una protección excelente.
La etiqueta UV Standard 801 es un proceso de certificación líder en la industria textil. Su enfoque único y diferenciador radica en su capacidad para evaluar el factor de protección ultravioleta de un material textil, considerando las condiciones del mundo real en las que el tejido se utilizará. A diferencia de otros métodos, la certificación UV Standard 801 toma en cuenta factores como la humedad, el estiramiento, la abrasión y el lavado, que pueden afectar la protección UV con el uso continuo.
La etiqueta UV Standard 801 puede aplicarse a una variedad de productos textiles y la certificación se divide en dos clases:
Los tejidos más frecuentes con la etiqueta UV STANDARD 801 son aquellos que alcanzan niveles de certificación UPF 10, 15, 20, 30, 40, 60 u 80. El valor obtenido en la prueba se devalúa al siguiente nivel más bajo si no alcanza el nivel máximo.
Con el respaldo de la Asociación Internacional de Pruebas para la Protección UV 801 y la participación de centros de certificación líderes como AITEX en España, esta etiqueta se ha convertido en un estándar confiable en la búsqueda de textiles que priorizan la salud y el bienestar en un mundo bañado por el sol.
La ropa de trabajo con factor de protección ultravioleta está diseñada para proteger contra la radiación UV. Estas prendas suelen tener las siguientes características:
Una característica adicional y que cada vez se hace más necesaria es la transpirabilidad de la ropa. El vestuario laboral con UPF, a pesar de ofrecer una alta protección contra la radiación UV, también debe ser transpirable y permitir la circulación del aire para evitar el sobrecalentamiento y la incomodidad durante el trabajo.
Por último, es importante recalcar que el uso de vestuario laboral con protección ultravioleta no exime al trabajador de la utilización de cremas de protección solar. Los rayos UV son perjudiciales para la piel si nos exponemos sin fotoprotección. La ropa proporciona una protección solar extra al absorber parte de las radiaciones del espectro solar UV que alcanzan la superficie del tejido y, por consiguiente, consigue bloquear su transmisión. Con el uso de cremas y vestuario de protección solar se cuidará la piel y se reducirá el riesgo de contraer enfermedades cutáneas graves.
Además, según datos de la Skin Cancer Foundation, la protección ultravioleta proporcionada por la ropa depende de 8 factores. Te lo contamos en el artículo: Todo lo que debes saber sobre la ropa de trabajo con protección solar UV.